La Leyenda del Conejito en la Luna

Para muchas culturas, la luna representó la belleza y el poder femenino. Los griegos la llamaron Selene y también Artemisa, para algunas culturas precolombinas se llamó Chía y para los fenicios era Astarté. Incluso hoy en día se le suele asociar con la feminidad. Es reina de los cielos y diosa madre. También se le suele asociar con la locura y con algunos animales como la rana, el lobo, el conejo y la liebre. Lo del conejo se debe a una ilusión óptica que ocurre en la cara de nuestro satélite natural, muchos aseguran ver la silueta de un conejo en lo que son montañas, cordilleras, cráteres y fondos secos.

El sacrificio del conejo

Existe una antigua leyenda japonesa denominada Tsuki no Usagi (Conejo lunar) y cuenta que

Hace mucho, mucho tiempo existió un anciano peregrino que durante un largo viaje se topó con tres animales: un mono, un zorro y un conejo. Al estar hambriento y cansado pidió a los animales que buscaran alimentos. El mono se subió a un árbol y le trajo fruta, el zorro, al ser un astuto cazador, le trajo un ave, pero el conejo, rezagado, no encontró alimento alguno. Al observar el fatigado rostro de aquel hombre, el conejo sintió culpa y decidió agrupar algunas ramas, encendió una fogata y brincó sobre el fuego para ofrecer así su carne. El anciano (que era realmente un poderoso dios) se conmovió por aquella acción, recogió sus restos y los enterró en la Luna. Desde entonces, en los cielos, se puede ver la figura de aquel bondadoso animal.”

La luna para algunas mitologías

Algunos son más creativos y sostienen que el conejo parece estar preparando un Mochi (pastel de arroz japonés), otros dicen que la silueta se asemeja más a un rostro o a la sombra de un hombre que lleva un gran peso en su espalda. También se dice que los conejos brincan porque desean alcanzar a su héroe lunar. La liebre también comparte vínculo con nuestro satélite natural y eso los convierte en representaciones de la resurrección y el renacimiento. Para muchas culturas antiguas el ciclo lunar es un recuerdo de nuestra condición efímera. Es un ciclo constante de gestación, crecimiento y muerte. Lo mismo sucede con las ranas. Heket, la diosa egipcia de la fertilidad, los nacimientos y la vida era representada como una mujer con cabeza de rana y para los antiguos chinos la rana de tres patas era una fuerza femenina asociada con la vida y los eclipses de luna.

La leyenda del conejo en distintas culturas

Conejo Jade
Conejo Jade con la diosa Chang’e (China). Cortesía de Spanish China.

  • En la tradición china podemos encontrar un relato similar, conocida como La Leyenda del Conejo de Jade, donde el Emperador de Jade se disfrazó de un anciano pobre y hambriento, para mendigar alimento a cuatro animales: un mono, una nutria, un chacal y un conejo. El mono acumuló frutas, la nutria capturó peces, el chacal atrapó un lagarto y el conejo solo pudo recolectar hierba. Al darse cuenta que no podía ofrecer hierba como alimento a los seres humanos ofreció su cuerpo y se sacrificó en el fuego que había preparado el anciano. Para sorpresa de todos, el conejo no ardió y el Emperador de Jade agradecido por tan generosa ofrenda lo dejó vivir en el Palacio de La Luna, como mascota de la hermosa diosa Chang’e. Otras versiones cuentan que cuando la diosa llegó flotando, el Conejo de Jade ya se encontraba ahí.
  • En Corea esta misma leyenda se conoce con el nombre de Daltokki.
quezalcoatle conejo luna
Quetzalcóatl (Azteca).
  • Existe una leyenda azteca que toca el mismo tema y sorprende por la similitud de su relato: Quetzalcóatl, decidió viajar una vez por el mundo en la figura de un hombre. Como había caminado tanto se sintió fatigado y hambriento, así que decidió descansar a la orilla del camino, cuando vio que un conejito estaba comiendo zacate (pasto), Quetzalcóatl se mostró curioso y el conejito le ofreció de su comida pero a este no le gustaba el zacate, entonces el animal se ofreció como alimento. El dios, en agradecimiento, lo levantó hasta la luna donde quedó marcada su figura para toda la eternidad.

La leyenda del conejo de la luna en la actualidad

Los otakus conocen muy bien de esta leyenda debido a su presencia en diferentes mangas y productos de la cultura nipona. Por ejemplo, en Sailor Moon (1992), el personaje principal, Usagi Tsukino (conocida como Serena en Latinoamérica), se encuentra inspirado en este relato. En Dragon Ball (1984), Gokú vence al Jefe Conejo dejándolo con sus hombres en la Luna.

Usagi Tsukino 01
En Sailor Moon el personaje principal, Usagi Tsukino (conocida como Serena en Latinoamérica), se encuentra inspirado en este relato. Imagen tomada de Fandom.

En Mondaiji-tachi ga Isekai Kara Kuru So Desu Yo? (2012) el personaje Kuro Usagi (Coneja Negra) pertenece a la raza: Conejo de la Luna.

7149ccd7a01cc30717608de1716a4b8e
El personaje Kuro Usagi (Coneja Negra) pertenece a la raza: Conejo de la Luna.Imagen tomada de pinterest.

También existen varios cortometrajes animados que se inspiran en esta historia. En 2013, la directora mexicana Melissa Ballesteros y el guionista Max Thomsen entregaron un producto espléndido que narra la historia de tres hermanos: Metsli y Toshtli, son los gemelos y se están tomando fotos de una cámara instantánea. Zacatuche, el hermano menor, aparece y hace todo lo posible por formar parte de aquella sesión fotográfica. Este corto estuvo nominado en la categoría de Mejor Cortometraje Animado en los Premios Ariel de 2015 y resultó ganador en la octava convocatoria de Apoyo a los Productores Independientes. Abajo podrás encontrar un link que te llevará directamente al cortometraje.

Conclusión

Lamentablemente, cuando Neil Armstrong pisó la luna, no encontró conejos ahí. La superficie tampoco estaba hecha de queso y los extraterrestres no se acercaron para saludarle. Sin embargo, los mitos y leyendas suelen ser fascinantes y esta es asombrosa por su peso e importancia cultural. Que una misma narración se cuente en culturas tan distantes solo nos hace pensar que es más antigua de lo que nosotros creemos. Pero hay que tener cuidado cuando observemos la luna en busca de aquel conejo, si lo encuentras piensa bien si debes seguirlo o no como lo hizo Alicia en aquel cuento. No olvides que la luna siempre guarda un lado oscuro.

Cortometraje recomendado:

 

Eduardo Trebison

Artículo anteriorAOKIGAHARA: El bosque de los suicidios
Artículo siguienteArrival: Explicación completa de la película (Spoiler Alert)

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.